Querida Lady M.: El cartero cayó el otro día en un charco del camino a Devonside, con lo que muchas cartas y varios paquetes volcaron y quedaron sucios y empapados. Hubo que esperar a que se secaran y luego descifrar a duras penas las direcciones. Con todo eso, tu amable invitación no nos ha llegado hasta hoy, toda embarrada...¡Cielos!¡Tengo ya ganas de que inventen el teléfono! Con cariño. Madame Eau
Querida Lady M.:
ResponderEliminarEl cartero cayó el otro día en un charco del camino a Devonside, con lo que muchas cartas y varios paquetes volcaron y quedaron sucios y empapados. Hubo que esperar a que se secaran y luego descifrar a duras penas las direcciones. Con todo eso, tu amable invitación no nos ha llegado hasta hoy, toda embarrada...¡Cielos!¡Tengo ya ganas de que inventen el teléfono!
Con cariño.
Madame Eau